Yo, que siempre he sido de aprovechar el momento, que siempre he dicho que las locuras hay que hacerlas ahora, y que los buenos momentos irán desapareciendo poco a poco. ¿Quizá ya han desaparecido? ¿Quizá ya me he hecho mayor sin darme cuenta? Porque, claro, he pasado tantos años encerrada que me he perdido toda esa edad de oro. Y, ahora, de repente, estoy en 2º de bachillerato, con un miedo terrible a que pase el tiempo, porque este año sí que he conocido la felicidad, pero me está dejando un sabor muy amargo, porque poco a poco se está yendo sin ni si quiera decir adiós.
¿Por qué soy tan exigente conmigo? Bueno, el por qué ya lo sé, lo que realmente me pregunto es por qué el destino quiere que sea así, con todo el dolor que eso conlleva, con todas las cosas que estoy sacrificando...
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