domingo, 25 de septiembre de 2011

Ya cambiaste

¿Y qué hay ahora de esa a la que tanto amabas? ¿Ya la olvidaste?
El amor de los jóvenes no habita el corazón, sino los ojos.
¡Cuántas lágrimas por ella! Y cómo lavaron tus claras mejillas.
Cuánta agua salada vertida inútilmente por un amor que ya no sabe a nada.
¿Por que el amor parece tan dulce en apariencia, y si se prueba tan tirano y cruel?
Y sí, ella posee la riqueza de lo bello, pero es pobre, porque todo cuanto tiene con ella ha de morir.
Pues porque para el amor no hay límites de piedra, y lo que el amor puede lo debe intentar el amor.
Si alguna vez fuiste tú mismo, si los suspiros eran tuyos, tú y tus suspiros eran para los ángeles.
Y ahora has cambiado.


sábado, 24 de septiembre de 2011

¿Y qué hacer con tanta emoción en tu corazón?



Te sorprendiste mirando a quien no hay que mirar
Te confundiste amando fuera de lugar
¿Y qué hacer con tanta emoción en tu corazón?

Una pregunta cruza tu mente sin más
Todo lo que fue ya no será
Si no hay respuesta en la razón

Siempre deseando tu otro yo
Alguien que te amara sin temor
Y ahora resulta que no es lo que esperabas
Lo entiendes al revés

La pregunta no es si ella o él
Es lo que tu sientes
No te niegues a querer algo nuevo y diferente
Ya no suman cuatro dos y dos
La verdad no miente
Él es ella y ella es él
Lo esencial está en el alma

el alma, el alma, el alma, el alma
el alma, el alma, el alma, el alma

Pretendes ocultar tu necesidad
Prefieres que te gane el que dirán
Pero es tu vida al fin la que construyes
¿Que más dan los demás?

Siempre deseando tu otro yo
Alguien que te amara sin temor
No tengas miedo si no es lo que esperabas
Ahora lo entiendes bien

Son sus ojos los que quieres ver a tu lado siempre
No te niegues a querer algo nuevo y diferente
Qué te importa ahora si ella o él?
Si es lo que tu quieres
No hay error si hay amor
Lo esencial está en el alma

el alma, el alma, el alma, el alma
el alma, el alma, el alma, el alma

Sigue tu instinto no mires atrás
Une tu alma la felicidad
No debes dudar atrévete a avanzar
Aunque no sepas bien a dónde vas

La pregunta no es si ella o él
Es lo que tu sientes
No te niegues a querer algo nuevo y diferente
Qué más da el ser un nuevo ser
Si es un sentimiento
Él es ella y ella es él
Sólo existe este momento

La pregunta no es si ella o él
Es lo que tu sientes
No te niegues a querer algo nuevo y diferente
Ya no suman cuatro, dos y dos
La verdad no miente
Él es ella y ella es él
Lo esencial está en el alma

el alma, el alma, el alma, el alma
el alma, el alma, el alma, el alma

¿Sabías que los abrazos tienen que durar al menos seis segundos para que produzca una reacción química en el cerebro?

Dicho esto, abrázame durante toda la vida.

¿Destino?

He oído a mucha gente hablar del azar y del destino como si hablasen de la comida que van a preparar mañana, sin darle importancia alguna. Y me sorprendía mucho. Muy pocos saben de lo que hablan cuando hablan de este tema, o, tal vez, sea que yo le doy demasiada importancia.
Yo siempre he creido en el destino. Siempre he pensado que la vida era un libro en el que tú pasabas unas páginas que ya estaban escritas. Y, en parte, eso era bueno. Porque, cuando me pasaba algo malo, me consolaba diciendo "bueno, me lo merecía, ese era mi destino".
Pasé por circunstancias que me parecían horribles, dolorosas, injustas, y, con el tiempo, aprendí que todo eso fue necesario para llegar a ser la persona que soy ahora. Y, ahora, al ver las cosas desde otra perspectiva, puedo decir que mi pensamiento ha cambiado. Sí, sigo creyendo el destino, pero de una forma diferente, tan diferente que ya no sé si se le puede llamar destino.
He aprendido que, en la vida, hay que estar siempre despierto para lo que pueda pasar, porque, si te rindes, estás muerto. Y ahí es cuando se demuestra que no hay destino. Porque creo que nadie se merece morir, o, al menos, nadie se merece el dolor que causa una muerte.
Pero tampoco existe un golpe de suerte que pueda cambiar las cosas, ya que, como dicen, la suerte hay que buscarla, por lo que, si las cosas cambian, es, siempre, por ti, no por un libro escrito que ni si quiera sabes en qué cajón está.
Por eso creo que no existe el azar, ni tampoco el destino; no hay nada en que creer. Sólo en nosotros. Debemos creer en nosotros. Al fin y al cabo, nosotros somos los únicos que podemos escribir las líneas de nuestra vida. Porque si algo he aprendido en mis pocos años de vida es que un camino lo hacen los pies, y a mí nadie me ha demostrado que mis pies se mueven solos.

sábado, 17 de septiembre de 2011

Difícil es olvidar lo que sentí

Empieza por ti, la historia más triste que viví.
Tuve los ojos pintados de lo negro de la vida.
La llama se apagó en mí para siempre.
Ya lo ves, terminó tan fríamente.
Y así lo viví, ciega de ilusión en la oscuridad.
Así lo viví, tan sólo tu voz me hubiera podido salvar.
Pero, entonces, te escondiste... Y ahora qué... que será de ti.

Pensando en ti, tu recuerdo se arrastra sobre mí.
Pero tranquila, no fue causa de ti, ni del ayer.
Fue culpa de mi miedo a no ser.
Pero, no importa, cambiaré.

...Al fin y al cabo, ahora eres libre, libre de mí.

jueves, 15 de septiembre de 2011

He aprendido

que el destino se burla siempre de nosotros, que no nos da nada, y nos promete todo.

lunes, 12 de septiembre de 2011

Confía en mí



Quizá mi nombre es nuevo para ti. Quizá mi voz tan solo son palabras. Quizá tus labios dudan frente a mí, pero saben que me besaron cada mañana, un instante antes de despertar de mi sueños.
Me ves y no me miras. Me oyes sin escuchar. Y yo como una niña, otra vez, me vuelvo a enamorar.
Confía en mí, volveremos a cruzarnos por la calle, y volverá a llevarse el viento mis palabras, y otra vez podré mirarte sin querer... y otra vez no hará falta decir nada.

jueves, 8 de septiembre de 2011

El mundo de hoy

Atravesamos una crisis de valores tremenda, nadie que haya vivido en épocas de paz puede imaginárselo.
Las parejas ya no se dan la mano al pasear.
La gente cruza las calles sin mirar.
Los ancianos ya no se sientan en la plaza al lado de otros ancianos para hablar; ahora se sientan en bancos vacíos.
Los adolescentes se refugian en su música cuando van caminando en lugar de observar el maravilloso mundo que les rodea.
Hay cada vez más perros con correa, y menos en libertad.
Los coches pasan a una velocidad que es imposible reconocerlos.
Las chicas de doce años visten como si tuviesen dieciocho, y las de dieciocho se comportan como si tuviesen doce.
Un sábado por la noche casi nadie recuerda dónde vive, y, si lo recuerda, no sabe cómo encajar la llave en su casa.
Ahora se infravalora el deporte, ya que la mayoría de la gente prefiere hacer deporte de pareja.
La comida basura hoy abunda.
Cada vez hay más cáncer de pulmón, y más comas etílicos.
Los adolescentes ya no saben qué son las cartas, ahora hablan por tuenti.
En lugar de leer un libro físico, la gente se compra 'ebooks' y olvida la gran sensación de oler y tocar un libro nuevo.
A la hora de hacer un examen se sacan del estuche montones de papelitos con todo el temario, en lugar de estudiar para aprender.
Ahora, duele más la caída de un aparato tecnológico, que nuestra propia caída.
Las personas, ahora, camuflan lo que sienten. Regalan sonrisas y marcan las miradas. Seleccionan los momentos con una fecha. Dejan historias sin final. Olvidan lo que sienten antes de que les de tiempo a saberlo. Ahora se dice 'te quiero' como quien dice 'hola'. Los besos se regalan, y los calentones en cualquier parque a cualquier hora de la tarde son rutina.
Los niños que una vez se maravillaron al ver una paloma muerta caminan ahora entre cadáveres humanos degollados sin sorpresa alguna.
El amor es como los fantasmas, en boca de todos, pero no ha sido visto por nadie.
La compasión ya no es una característica humana.
Se venden personas por montones. Las familias se dan las espalda entre ellos. Hay nefastos negocios de carne humana.
Es verdad... provoca asco asomarse por la ventana.
Lo que un día fue el lugar de tantas especies es hoy un holocausto. Cada rincón de la Tierra es un escondite del cual no podemos escapar del miedo que se respira día a día.
Nos estamos ahogando. Y lo peor es que no estamos haciendo nada para cambiarlo.
Es bien triste.

martes, 6 de septiembre de 2011

Creo que los kamikazes se quedaron en la II Guerra Mundial

Ya no lo puedo llamar "kamikaze", sólo lo voy a llamar "decir lo que siento", porque ya no puedo morir más, ya he muerto diez mil veces, y he vuelto a revivir, resucitar o... o como quiera que se llame, pero aquí estoy, sabiendo que en la vida me voy a caer millones de veces, por cualquier cosa, por todo, pero siempre me voy a levantar una vez más, Siempre.
Ya no tengo miedo.
Yo quiero estar contigo, y si tú no quieres lo mismo... no pasa nada, lo respeto y sigo adelante. Caigo y me levanto, no es nada difícil, tengo experiencia. Y si me levanté de aquella caída... me puedo levantar de todas. Sí.
Entonces, ¿soy un kamikaze contigo? Eh... Quiero decir, ¿te digo lo que siento por ti? Creo que no hace ni falta, creo que ya lo sabes.

sábado, 3 de septiembre de 2011

Nos estamos ahogando

Atravesamos una crisis de valores tremenda, nadie que haya vivido en épocas de paz puede imaginárselo. Los niños que una vez se maravillaron al ver una paloma muerta caminan ahora entre cadáveres humanos degollados sin sorpresa alguna. El amor es ahora como los fantasmas, en boca de todos, pero no ha sido visto por nadie. La compasión ya no es una característica humana. Se venden personas por montones. Las familias se dan la espalda entre ellos. Hay nefastos negocios de carne humana. Es verdad, provoca asco asomarse por la ventana. Lo que un día fue el lugar de tantas especies es hoy un holocausto. Cada rincón de la Tierra es un escondite del cual no podemos escapar del miedo que se respira día a día.
Hoy satanizan a los homosexuales, pero no a los asesinos.
Hoy condenan a quien aborta, pero no a quien abusa.
Hoy la iglesia come de un banquete que le es prohibido a los más necesitados.
Hoy se canta sobre caridad con micrófonos de oro macizo.
Hoy se predica no fumar entre humo de tabaco.
Nos estamos ahogando.

Cuántos golpes recibidos...